Ante lo irreversible, mostramos como testimonio futuro, una imagen de una parte de la ciudad que ya no existe y no se re-genera con la misma carga arquitectónica, simbólica, artística, familiar, barrial o colectiva.

Muchas de ellas han sido demolidas en forma clandestinas, sin permiso de obra, de atrás para adelante, sin la debida protección de los obreros o de los vecinos de las casas lindantes.

Otras, pese a su innegable valor arquitectónico y de estar portegidas por la Ley 3056 de la CABA, fueron condenadas a la piqueta justamente por el organismo que debería
preservarlas.

Con suerte, podemos mostrarles el "antes" y el "después", para crear conciencia sobre el patrimonio arquitectónico porteño arrasado en esta última oleada. Es un triste "obituario virtual", de piezas de una ciudad cuya mayor riqueza, era, justamente, su eclecticismo arquitectónico.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Bogota 3646



1 comentario:

Cristian Tonhaiser dijo...

no solo demolieron la casa... sino, que se fue el árbol con ella! no solo son salvajes, sino impíos.